miércoles, 7 de septiembre de 2011

Septiembre...

Septiembre...
Siempre fué un mes bastante... sufrido.

Cuando eres pequeño, Septiembre significa el final de las vacaciones. Esas tan largas. Tan llenas de tiempo y de mil cosas que hacer.
Vuelve el tiempo de los deberes, los madrugones, los controles, progresa adecuadamente, las actividades extraescolares, el irse pronto a la cama... etc etc...

Cuando creces un poco más... llega el mes de las recuperaciones. No puedo hablar de los exámenes de Septiembre del instituto, porque fuí una adolescente bastante empollona. No era ni "cuatroojos" ni "acusica", pero sí empollona. Así que para mí Septiembre, seguía significando el mes de fin de vacaciones.
Pero sí puedo hablar de los exámenes de la facultad... después de ese verano de madrugones y tardes de pocas ganas de estudiar, de 4 para Septiembre.

Cuando ya has crecido y eres una mujer u hombre (se pone la "u" por fonética?) de provecho (o eso te crees), Septiembre suele ser el mes de fin de vacaciones... de vuelta al trabajo, de volver a aguantar al "simpático" (a) de tu jefe (a)... del compañero gritón, del pesao que alardea de su viaje a la Conchinchina, dime de qué presumes y te diré de qué careces...

Id a por el pan que yo no voy a ir.
Y a por la leche, yo no voy a estar.
Antes de que me echen prefiero salir, aunque sea abriendo la puerta de atrás...

Hace... puffff... pues unos 11 años, aquí la menda se iniciaba en el maravilloso mundo del rock español, de la mano de un buen amigo de aquel entonces. Hoy desaparecido en combate.
En la Riviera, aquellos 4 tipos me metieron un gusanillo en el cuerpo que anidó, se aferró y lo adopté.
Aquel Josele con su boina, voz rasgada, guitarra en alto, junto con Fino, Chema y Manolo... me tocaron la fibra. De la forma en la que sólo una banda de rock puede tocar la fibra. Dentro.
Tanto, que me metí en la boca de un foro... y además de adoptar a esos 4, adopté (y me adoptaron) a un grupo de gente igual de tocada por ellos como lo estaba yo...

Mi macuto en esos dos años, se hizo y deshizo infinidad de veces... Pilar de la Horadada, Castellón, Tarragona, Madrid, Santiago, Murcia, Granada, Salamanca... siguiendo a esos 4. Y acompañada de mi familia enemiga.

Septiembre... siempre fué un mes duro y crudo.

Este año... ha terminado una cuenta atrás que muchos deseábamos en silencio.
Ummm... cuando te has tirado unos 4 años detrás de ellos, has ido a un montón de conciertos y has notado en cada uno de ellos que la piel de gallina no se va nunca, el motivo puede quedar en segundo plano.
Cuántos siguen por dinero? cuántos vuelven por dinero? Un montón.
Ellos por lo menos, lo dicen.
Y a mí me hace feliz....

Septiembre...
Voy a estrenar corbata hoy...


Beso

2 comentarios:

  1. Marta sin dinero no hay rock and roll. Las Fender valen una pasta!

    Respecto a la iniciación en el rock patrio... menudo descorche! Enemigos creo que ES la banda de rock española, es cierto que hay muchas más... a mí personalmente que no me toquen a los Nacha Pop de los dos primeros Lp's, esos Gabinete... Tequila (que desvirgue! me metí con esas guitarrazas!), Leño, Burning... y muchos más pero Enemigos... de lo mejor! y está escrito y grabao.

    Por cierto que Septiembre ha dejado de ser solo un mes para convertirse también en un temazo gracias al Josele y sus amigos.

    Besos desde el jergón!

    ResponderEliminar
  2. A que molan mis inicios en el rock patrio?
    Rosendo y Los Enemigos... ainssss. Me hice esperar, pero entré a lo grande!!

    Septiembre se ha convertido en el mes.Bueno, y Abril, que Sabina también me gusta!!

    Te mantengo informado, ok? Seguro que nos vemos en tu tierra.

    Ya andas de vuelta, verdad?

    Desde el jergón... : ) Esa es mi canción.

    Besos

    ResponderEliminar